Atrapada en Junio


Todos sabemos que soltar luego de despedirse no es sencillo, que duele, pero hago lo posible por poder hacerlo, intento llenarme de razones que me ayuden a pensar que no me quiere y lo más terrible es que pareciera que no importa. Hoy siento malestar con el primer chico del que me enamoré, no porque no esté con él, pues ya hace bastante tiempo logré dejarlo atrás, más bien porque no me sentí correspondida y siguió esa ilusión mía en el amor,  porque si mi concepto no hubiese sido ese, de seguro me habría alejado de los chicos que llamaran mi atención, y ahora otra persona vuelve a romper mi corazón, que a pesar de lo precioso que fue, a pesar de no tener intenciones de hacerme daño, aquí solo hay tristeza y como dice una canción “si no sonrío, lloraría”.

El tiempo después de él, no lo sé, creo que me quiero bastante, pero siento como si él me lo hubiese enseñado y no se como sentirme, porque desearía estar a su lado, no es que no pueda vivir sin él, solo que tengo claro que como él no habrá nadie más, porque de una persona no existen dos. De hecho, soy un poco más libre en decir lo que quiero, o lo que me gusta, quizás porque para estar con él, lo necesité en casa. Borro su número porque lo que quiero saber de él, solo deseo sea desde su boca y aunque el saberme su número hace que vuelva a registrarle en mis contactos evito ver sus estados o historias, pero lo juro, quiero olvidarlo, pero en esos momentos cada número (a pesar de meses) simplemente va fluyendo de mi mente.

Solo no quiero volver a verle, porque mil veces podré jurar que ya no siento nada y solo el sonido de su nombre me hacen saber que no es así, desearía volver a los lugares y las actividades que tenía con él, pero lo que intento no es reemplazarlo en situaciones que solo nos correspondieron a los dos, en situaciones que solo tendrían significado con él, solo quiero que no salgan lágrimas cuando no puedo saber nada de él, cuando recuerdo que no me volverá a contar nada, o cuando pienso en que hace cuando está triste, no quiero sentir esa opresión en el pecho cuando algo que veo o escucho lo puedo asociar a él, o cuando siento su olor en las calles.

Hoy escribo atrapada en Junio, porque es el mes de su cumpleaños, pero escribo confiando en que mañana ya sanará, confiando en que estas letras recordarán que aún le amaba románticamente, confiando en que estará mejor que nunca, hoy escribo porque confío en que mañana le miraré y podré sonreír sin tristeza, porque confío que mañana le escucharé y solo tendré admiración para él, hoy le escribo confiando en que ya perdí la cuenta de los meses y por él no habrá una lágrima más. Hoy te diré amor mil veces en mi cabeza, porque cuando quise gritártelo por miedo a ti, dentro de mi se ha guardado y ya se que necesita salir. Hoy miraré con extrañeza ese regalo que nunca quisiste recibir, porque siempre será tuyo y no me atrevo a abrirlo, porque nunca ha sido para alguien más, ni siquiera para mí.

Hoy te digo adiós, adiós, cariño hermoso, adiós amor.

Comentarios

Entradas populares